jueves, julio 19, 2007

Que lo parió...

Me había enterado de casualidad. Venía a Córdoba a presentar una muestra de dibujos originales. Era imposible perdérselo. Hacía algunos días había adquirido uno de sus libros, “No te vayas campeón”. Uno bien futbolero, de los que él disfrutaba escribir y de los que yo disfrutaba leer. Así que cargué el libro en una mochila, un marcador por las dudas, y me mande al Centro Cultural España Córdoba. No había mucha gente, no se le había hecho mucha publicidad al evento. “Menos mal”, pensé en ese momento, así a la hora de firmar libros no se armaba mucho quilombo.

Al cabo de un largo rato nos invitaron a pasar a todos los curiosos que nos reuniéramos en el salón principal, por que El Negro (sí, con mayúscula, porque a las instituciones se las escribe con letra capital) iba a hacer una especie de presentación de la muestra. Improvisó algo. Como siempre. O como nos hacia creer siempre.

Traté de ubicarme entre las primeras filas y lo logré. Segunda fila, sexto asiento desde la izquierda, un lujo. De pronto por una puerta del costado del escenario apareció. La verdad que pensaba que era más grandote, nose, me lo imaginaba al estilo de Boggie: grande y tosco, con aires de pocas pulgas. Se acercó tímido hasta la silla que lo esperaba en el diminuto escenario, arrojó un “hola” al pasar hasta su silla y luego aclaró: “me dijeron que me siente y hable, pero nose de qué, así que si quieren hacerme alguna pregunta no hay problema”. Esa simple aclaración, ingenua e inocente, bastó para que los pocos que estábamos ahí reunidos comenzáramos a soltar las primeras risas.

La ronda de preguntas fue corta, pero el temario bastante amplio. Recuerdo que respondió desde temas de profundo análisis como el atentado a las Torres hasta la nueva incorporación de Rosario Central. No me cabía la menor duda de que para él era más importante la última incorporación del canalla antes que lo ocurrido en EEUU.

No fueron más de 20 minutos de charla. Pocas preguntas, pocas respuestas pero notablemente respondidas, dejando en off side a mas de un curioso que pasaba por ahí.

Después vino lo que todos esperaban, la firma de libros, improvisada, como todo el evento. Alguien le acercó un marcador negro y empezó a firmar todo lo que le acercaran. Esperé que la turba se calmase un poco y me acerque con el libro que quería que me firme. Me preguntó el nombre y selló su stampa. Yo, más que agradecido.

Hoy cuando me enteré de la mala noticia, agarre el libro, y recordé aquella noche que conocí al Negro. Leía el título: “No te vayas, campeón” y creo que en este momento lo reformularía diciendo “Te fuiste como un campeón”.

11 comentarios:

silvi a. dijo...

Que espectacular tener ese recuerdo. El Negro Fontanarrosa es y será un maestro, yo lo adoraba.

Anónimo dijo...

Emotivo y hermoso homenaje, Dieguito. La firma del final, los ojos de Mendieta... Hoy, Fontanarrosa sacó lo mejor de nosotros. Desplazó a la política de las tapas de los diarios y nos hizo escribir desde adentro.

Hoy, todos lo sentimos como un amigo en el día del amigo. Y qué cosa, qué mejor ofrenda el que hoy todos se juntan a comer algo, a brindar por la amistad. Los hombres vamos a charlar de mujeres y de fútbol; ellas, de los hombres y de sus cosas. En la mesa de un bar, a grito pelado. Salud, Negro: hoy somos uno de tus cuentos.

guadis! dijo...

Entré a ver el blog proque estaba segura de que ibas a postear algo sobre El Negro (con mayúscula!). Feliz día!!

Anónimo dijo...

Hola Diego!! Que emotivo comentario!!
Suerte que lo conociste!!

Espero que hayas tenido un Feliz Día junto a tus amigos !!

Saludines!
=)

Pablo Zapata dijo...

El valor emotivo de esa obra NO TIENE PRECIO! hacele un cuadrito y colgalo al lado de la cama... la verdad que no cualquiera lo puede tener.

Saludos.

Pd. Ya estas agregadisimo a mi blog.

Anónimo dijo...

SABÍA Q ALGO TENIAS Q POSTEAR EN HONOR A ÉL...
Fuiste la primer persona en la que pensé cuando me enteré de la noticia... Q LO PARIÓ!

Anónimo dijo...

Gracias por pasarte por mi blog!
Si,coincido totalmente con lo que decis del día del "amigo".No es mas que excusas para vender..,pero fuera de eso,como dijo alguien por ahi en mi blog.."Si hace feliz a alguién.." :)
Creo que El Negro,tenia unos amigos de fierro..,los homenajes que le hicieron...todo!! Eso si que vale la pena !!
Muy linda tu historia de como lo conociste...,sos afortunado!

Saludines!
=) Que estes bien!

Granjera dijo...

Bueno, la verdad es que no me gusta lo que ponés en La Nación, pero particularmente me llegó mucho el dibujo de la "nueva constelación" , es una lástima que mi madre haya tirado el diario..

Lau Giubergia dijo...

Muy lindo tu homenaje Diego, pero más hermoso debe ser tu recuerdo. Apoyo la idea de q hagas un cuadrito para poner junto a la cama!! Feliz día!

Anónimo dijo...

Diego, que lindo y emotivo tu recuerdo del NEGRO,seguí escribiendo con el corazón,por que sos muy bueno.

Martín dijo...

Que decir, me mató lo que escribiste sobre el Negro. Eramos tantos los que le teníamos un cariño grande... como humorista, escritor, canalla, en general simplemente como tipo. Y la pinturita que haces es bárbara, realmente. Uno no termina de estar ahí, pero está ahí. Abrazo!!!!